Hace mucho tiempo, había un dragón que dormía en una cueva en la cima de la montaña, donde tenía apreciados tesoros como: joyas y oro. Esto era muy importante para el dragón ya que era lo único que tenía y que podía proteger. Mientras tanto, en los bosques cercanos a la montañas, donde las hadas habitan, esas malvadas y traviesas criaturas se divertían. Pero a pesar de ello, una de ellas no era igual que las demás, aburrida de hacer la misma rutina, decide tomar una aventura e irse a la cima de la montaña. Esta hada se llamaba Esmeralda y un día nublado y aburrido le cambiaría la vida, al encontrar un dragón que aterrorizaba la ciudad de China.
Cuando Esmeralda entró en la cueva, muy silenciosamente, pudo ver que había un pequeño cofre que brillaba detrás de la gigantesca criatura. Luego de esquivar la enredada cola del dragón pudo ver lo que el cofre contenía; y dentro de él habían joyas y oro.
Ella no quería llevarse el cofre porque podría ser peligroso, el dragón podría despertar y lastimarla. Pero a pesar de eso, ella no pudo resistirse ya que ella era un hada y las hadas tienen el instinto de robar. Luego de una estrategia, Esmeralda se pudo llevar el cofre, sin que el dragón se despertara. Llegó a su aldea y las hadas, asombradas por lo que hizo Esmeralda, se enriquecieron y vivieron con lujos, pero no duró por mucho tiempo, al segundo día, se escuchó un rugido muy fuerte que hizo temblar no sólo a las hadas sino también a la montaña. En ese momento Esmeralda supo cuál era el motivo de ese ruido: el dragón se despertó para buscar lo que le habían robado mientras dormía. Asustadas, las hadas se escaparon volando pero no tuvieron tiempo ya que el dragón cayó en el medio del bosque, tapando el camino de salida, y no se movería hasta encontrar lo que le habían tomado, sin moverse o hacer un ruido las hadas escondidas en los árboles no podían escapar, entonces el dragón gruño:
-¿Dónde está mi cofre? Si no me lo devuelven, las mataré a todas!!
-Espera, espera. Dijo Esmeralda. “Te devolveremos el cofre, sabemos que cometimos un error, es que, nosotras las hadas, tenemos el instinto de robar y no pude resistirme, pero por favor no nos mates, es que nunca pudimos tener el lujo de tener estas cosas, no creas que vivir en el bosque es genial,es horrible no encuentras casi nada, lo único bueno es que es un hermoso bosque pero jamás hemos tenido el lujo de tener esto, y cuando estuve en tu cueva, es decir tu casa y vi ese cofre creí que podía tomármelo prestado, mejor dicho robarlo para no despertarlo”.
El dragón está furioso pero lo que dijo Esmeralda lo motivó. Irritado por la situación, llega a un acuerdo con el hadan en el que el dragón propuso llevarse el cofre pero no solo eso sino que se llevaría a Esmeralda como prisionera. Si alguna hada se negara, el dragón las mataria a todas, entonces Esmeralda tomó el riesgo para proteger a sus amigas y se fue con él pero ese no era el plan del dragón sino que al llegar a su cueva colocó el cofre donde estaba y hizo sentar a la hada en una silla y en un parpadeo se comió al hada de un bocado.
FIN
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